Nacido en 1975 en Valladolid, crece en el seno de una familia de labradores en la bonita villa de Portillo, Valladolid.
En un entorno favorecedor desde bien pequeño voy familiarizando con la música y los bailes de la zona y con 8 años aproximadamente entro a formar parte del grupo de danzas Nivaria de Portillo.
En ese grupo, tristemente desaparecido, de la mano primero de Javi y después de Olga Villorejo me empapo de baile…allí entre las jotas vallisoletanas de la espadaña, el zángano…y muchas otras, la semillita del folclore entrara en mis pensamientos...donde dormirá unos años para resurgir con fuerza en el año 2012.
Como muchos varones, estúpidamente dejo de bailar en la adolescencia y sigo mi vida por otros derroteros.
Estudio la carrera de historia en la Universidad de Valladolid... En mis estudios vuelvo a ligarme al mudo tradicional pues esa semillita que llevo me hace escoger todas las asignaturas relacionadas con el folclore español y americano.
La docencia no me llama la atención y estudio cocina, otra pasión.
En 2004 cambio mi residencia a Tordesillas donde actualmente resido. Es aquí en Tordesillas donde vuelvo a retomar mi pasión por las jotas. En 2012 se forma un grupo de danzas y percusión y allá voy de cabeza... Presidente del mismo desde su fundación paso todo mi tiempo libre o ensayando, leyendo, buscando grupos para intercambios….
Organizando… El Corro es un grupo joven en tiempo pero con una fuerza grande que nos hace ir cada festival creciendo, conociendo otros bailes, otras piezas de nuestra zona e incluso bailar composiciones nuevas con músicas tradicionales de Tordesillas. En ese empeño de difundir lo nuestro hemos realizado este año nuestra primera intervención en colegios donde mostramos nuestro trabajo a los peques y acabamos todos bailando, También este año hemos dedicado una hora ala semana a enseñar jotas en el taller ocupacional Vicente del Bosque de Tordesillas donde recibimos mucho mas cariño de lo que podemos ofrecer.
Seguimos haciendo actuaciones en residencias de ancianos, bodas, intercambios por Castilla y León, y Portugal.
Pero lo que más hacemos es disfrutar de nuestras jotas y si hay una palabra que defina al “corro “de Tordesillas esa es sin duda Disfrute.
A día de hoy , con cuarenta años sigo cada día levantándome con una jota en la cabeza, con una idea nueva y espero seguir muchos años en este mundo.
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