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lunes, 12 de noviembre de 2012

Aguilando año 1993

En una época de apogeo y re-descubrimiento de las Cuadrillas de Animeros o de Pascua en el sureste español, se multiplicaron los denominados Encuentros de Cuadrillas, a donde eran llamadas preferentemente las consideradas más "completas" por tener repertorios con músicas para bailes sueltos e incluso bailaores más o menos espontáneos que las acompañaban.

Sin embargo, en la comarca de los Campos de Cartagena y Murcia, y de Mazarrón, al sur de la Región de Murcia, casi todas las cuadrillas conservaban únicamente repertorios ligados a la música tradicional navideña de origen religioso, sin músicas para baile: toques de misa y aguilandos (aguinaldos) o cantos improvisados por el guión o guía de Pascuas y respondidos por un coro. Estas cuadrillas eran menos vistosas por no llevar bailes, por lo tanto eran mucho menos demandadas por los festivales y por ello más desconocidas para el gran público. Con la intención de dar a conocer a algunas, y por iniciativa de la Cuadrilla de Fuente-Álamo de Murcia, en 1993 se grabó y editó una cinta-cassette (Cuadrillas Campo de Cartagena y Mazarrón. Libert, 1993) que contenía las músicas de ocho de ellas: La Aljorra, Los Molinos Marfagones, Las Palas, Las Balsicas-Puerto de Mazarrón, Lobosillo, El Escobar, Tallante y Fuente-Álamo de Murcia.

En la sesión de registro efectuada en Isla Plana (Cartagena, Murcia, España) en la agotadora jornada del 8 de enero de 1993 (se efectuaron varias grabaciones el mismo día), y a donde curiosamente no acudió la cuadrilla local, se grabó a la cuadrilla de Las Balsicas-Puerto de Mazarrón (Mazarrón, Murcia, España). Allí se le efectuó esta toma de prueba que se muestra en el vídeo y donde se puede ver al guión de Pascuas Francisco García improvisando unas coplas de Pascua o de aguilando que son respondidas al estribillo por un magnífico coro bien entrenado de varoniles voces.

Algunas de las cuadrillas de esta comarca tienen fama no sólo de tener buenos guiones de Pascuas, sino que los propios coros (a los que no en todos los lugares se les presta la debida atención) son tenidos por muy importantes, y por ello se buscan buenas voces, preferentemente de hombres, que ensayan suficientemente la respuesta del estribillo para conseguir unas sorprendentes y viriles modulaciones sonoras que realzan hasta emocionar el conjunto del canto.

Vídeo y texto: Manuel Sánchez Martínez (Murcia, España). Colección Memorias de la Tradición en Internet

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