La mujer rural vistió, de manera evolucionada, el vestido tradicional hasta los años 20-30, llegando los últimos vestigios hasta los años 60. Como se observa, estas mujeres visten así para una festividad importante, ya que van vestidas con ropa de domingo, (de diario no llevarían ni gipó ni volant, llevarían una blusa llamada marinera, y pañuelo atado bajo la barbilla). Las faldas siguen la moda internacional de la década de los 20, más cortas y con menos vuelo, como cualquier falda a la moda europea. Siguen llevando el gipó (jubón), y un poco más holgado, como marcan las tendencias de la moda.
El volant (que cubre la cabeza) es de tul, mucho más pequeño que los anteriores, que ya cubre sólo la parte posterior de la cabeza y asoma por la parte delantera.
Así, ellas pueden lucir los pendientes de oro, siempre largos. En joyería, las jóvenes no lucen el cordoncillo de 16 palmos (imprescindible en épocas anteriores, ni sa joia que prendía de él) , pero sí broches alargados en el pecho, muy habitual en esta época; además que se usaban para ponerse de adorno en el mantón pequeño, que llevaban casi siempre en esta época. siguen usando la botonada de oro para abrocharse las mangas, aunque la mayoría ya no usan la collada, y llevan 10; por la simple razón, de sustituir la camissa interior por otro tipo de ropa interior (aparecen camisas cortas y pololos cortos) y estos botones se prendían del puño de la camisa primitiva y larga. Algunas medallas, aros etc, siempre de oro.
Y en primer plano, un bolso de plata, de industria orfebre mallorquina y menorquina que se exportaba a toda Europa, y que Palma era el epicentro de su producción en la isla. De hecho, hoy en día, todavía muchas mujeres conservan y lucen este tipo de bolsos-joya de patrimonio familiar.
Posiblemente sea el día de San Jaime, patrón del pueblo de Binissalem, y elllas vengan de Misa, el abanico delata que sea en verano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario